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COACHING = ENTRENAMIENTO;  es la técnica hoy en día más usada para mejorar la performance de las personas en sus actividades corrientes de trabajo.

 

El interés y el entusiasmo por llevar el COACHING  al ámbito personal, profesional y empresarial es reciente. Es común escuchar a la gente hablar del COACHING como una palabra que describe un  gerenciamiento amistoso, supervisar, intervenir psicológicamente, aconsejar, ser experto en cierto ámbito, etc.; el COACHING tradicional trabaja en fundamento sobre las habilidades y formación de los participantes y busca de potenciar la performance de las personas. Sus metodologías comenzaron a aplicarse en un principio en el entrenamiento de ejecutivos, directores de personal, empresarios. En los años recientes, se hizo más popular y se expandió hacia otros estratos de la organización y se adoptó como modelo de gestión para mejorar y desarrollar el desempeño individual de empleados y equipos de trabajo. Se trata pues, de un proceso personalizado, ordenado y con una metodología que busca ayudar a la persona a trazar su plan de vida y a concretarlo.

 

Luego surge el llamado COACHING ONTOLOGICO que se define como un paradigma diferente, un contexto distinto para que los objetivos sean logrados en el ámbito personal o en el trabajo de equipo. El coach ontológico no le dice a las personas lo que tienen que hacer, no presiona, ni aconseja, ni recomienda, sino que explora, hace preguntas, ofrece interpretaciones generativas, desafía respetuosamente sus modelos mentales para desarrollar una nueva mirada que permita el descubrimiento de nuevas acciones y posibilidades; y acompaña en el diseño de acciones que faciliten el acceso a los resultados buscados.

 

El COACHING ONTOLOGICO se orienta al logro de resultados extraordinarios, con efectividad y  bienestar. Sin embargo, el foco del COACHING es la persona, el ser humano, y no el resultado o el efecto. Lo visible (el efecto) es lo que se percibe y, al mismo tiempo, oculta la importancia de lo invisible (la causa o el contexto). Por ello, desde siempre, las personas, seducidas por el resultado, pierden de vista los fundamentos y el proceso que son pre-condición para obtenerlo. La paradoja es que para conseguir un resultado, es necesario primero comportarse de manera tal de producir ese resultado. Y para comportarse de tal manera, es necesario primero ser el tipo de persona (equipo u organización) capaz de comportarse así. No hay, en definitiva, ocupación más práctica y efectiva que prepararse para ser la persona capaz de comportarse de la manera requerida para producir los resultados deseados.

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Más recientemente se promueve la técnica denominada PROGRAMACIÓN NEUROLINGÜÍSTICA - PNL que se conceptúa como “el Arte y Ciencia de la Excelencia Personal” (Joseph O’Connor – John Seymour); dicen “que es un arte, porque cada uno da su toque único personal y de estilo a lo que está haciendo, y esto nunca se puede expresar con palabras o técnicas. Es una ciencia, porque hay un método y un proceso para descubrir los modelos empleados por individuos sobresalientes. Este proceso se llama modelar y los modelos, habilidades y técnicas descubiertas, tienen un uso cada vez mayor en el campo de la educación, asesoramiento y negocios para conseguir una comunicación más efectiva, tener un mayor desarrollo personal y acelerar el aprendizaje.”

 

Lo que proponemos es simplemente aplicar de una manera similar, un tipo diferenciado de interacción: el MENTORING (TUTORIA) ENERGETICO – ENERGY MENTORING que, sin tratar de inventar una nueva metodología aplicativa, sino más bien integrando técnicas ya existentes, se orienta a impulsar la energía de la persona, lo que sin duda resulta mucho más efectivo. Pensamos que los dos tipos de coaching, la PNL y el Mentoring Energético, no son excluyentes sino que conformarán un SISTEMA INTEGRADO DE ENTRENAMIENTO DE LA PERSONA: (i) el coaching tradicional, que actúa sobre las habilidades y formación de las personas; (ii) el coaching ontológico que actúa sobre el comportamiento de las personas para el logro de resultados extraordinarios; (iii) el PNL que estudia cómo algunas personas (modelos) sobresalen en un campo y cómo enseñar estos patrones a otros; y (iv) el mentoring energético que actúa sobre la energía de la persona en términos de patrocinarla para enmendar sus rumbos en función de sus preferencias, capacidades y disposición a la acción, teniendo en cuenta  sus factores de drenaje de energía (entropía), para luego, a partir del potenciamiento de la energía de las personas, trabajar el grupo en términos de sintonía energética y sincronía en la acción, para potenciarlo y lograr la maximización de la productividad en el logro de los objetivos.

 

EL ELEMENTO CRÍTICO: LA CONCIENCIA…